Brindemos.

Reír a carcajadas;
Montar a horcajadas;
Servilletas estampadas
Y habitaciones estrelladas.

Botellas de cava;
Ginebra a toneladas;
Vodka para las heladas
Y chupitos de tequila
Mil y una madrugadas.

Manos congeladas;
Gambas peladas;
Noches de empalmada
Y cabezas estropeadas.

Aventuras improvisadas,
Increíbles escapadas;
Cien tormentas capeadas
Y ninguna nevada.

Tragar agua salada;
Saborear la escalada.
Mantener la tristeza encerrada
Y la apatía encadenada.

Días de películas y mantas;
Tardes de café y pastas.
De sonrisas mil subastas
Y de chuches mil canastas.

Porque la vida está hecha de esperanza,
De amor, de lucha y de confianza.
Está hecha de luciérnagas en el jardín;
De cometas que vuelan sin fin.
De “en fin, Serafín”,
Y de los que prefieren decir “delfín”.
Del “Feliz San Fermín”;
De encontrar un alma afín;
De sacar de la manga el comodín.

Porque la vida está hecha
de ti y de mí.
De todos los que reímos y lloramos;
De los que, antes de terminar la frase,
La olvidamos.
La vida está hecha de lo que no recordamos
Y de lo que, aun queriéndolo,
No olvidamos.

Hace 365 días prometí
poner puntos y finales
A las historias banales.
Prometí aceptar los cardenales,
Sobrevivir a días letales.
Prometí entender la vida
como algo visceral;
prometí ser siempre igual.

Este año ha sido estelar,
Increíble, fenomenal.
365 días que no quiero cambiar.

Mentiría si dijera que todos
han sido buenos;
que no me he caído
en todo este tiempo.
Que no he sangrado,
No me he sentido morir,
No he sufrido,
Ninguna lágrima he derramado.

Pero cuatro nubes no hacen sombra
a un día soleado;
a un cielo estrellado.

Hoy solo puedo dar gracias
Por todo lo que me has dado y,
También, por lo arrebatado.

Gracias al Sol que ha dorado mi piel;
Al aire con sabor a miel.
Gracias a las estrellas
Que iluminaron mis noches;
A la Luna que me guió 
Cuando estuve perdida.

Mil gracias a la vida
Por la buena compañía;
Por tanta alegría;
Por la sabiduría;
Por no dejar ni una copa vacía.

Un final no es más
Que el inicio de algo nuevo.
2016 has sido tan mágico,
Que 2017 no puede ser menos.
¡Así que brindemos!

Brindemos porque todo
Es perecedero;
Porque hay cosas mucho más valiosas
Que las posesiones y el dinero.

Brindemos por todos los “te quiero”,
Por todos los “yo puedo”;
Por no volver a decir “me muero”.

Brindemos por los abrazos sinceros;
Por los amores no tan verdaderos;
Por los primeros, los segundos
Y por los terceros.

Brindemos porque nos tenemos;
porque no estamos solos;
porque nos queremos.
Porque llegaremos a la cima
Si nos lo proponemos.
Porque aun las colinas verticales
Y los precipicios abismales,
Las vistas son siempre espectaculares.

Brindemos por un año extraordinario.
Un año lleno de risas, de llantos,
De poesía y novelas,
De viajes inolvidables y
Noches interminables;
Un año lleno de personas inigualables.

Brindemos porque 2017,
También será insuperable.

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